El Troodon, el dinosaurio con el arma más letal: La inteligencia.

El Troodon marcó un antes y un después en la paleontología, antes de su descubrimiento, se creía que los dinosaurios eran solamente animales torpes, lentos y sin ningún tipo de inteligencia, pero con el paso del tiempo y al ir conociendo mas sobre este dinosaurio, se cambio totalmente esa concepción arcaica, y nos demostró que hubo especies que rompían ese esquema.


Sin duda alguna fue uno de los dinosaurios más inteligentes, sino es que el más inteligente de todos, ya que su cerebro era bastante grande en comparación con el tamaño de su cuerpo, su cerebro era del mismo tamaño que el de un Emú moderno o un avestruz.

Ficha General.

Comparativa del tamaño de un Troodon comparado con un humano promedio.

Nombre: Troodon.

Longitud: 2 metros aproximadamente.

Altura: 70 centímetros a 1 metro.

Peso: entre 25 y 50 kilos.

Alimentaron: Carnívora, posiblemente omnívora.

Ubicación Geográfica: América del Norte y Asia.

Periodo: Cretácico superior.

Descubrimiento.

El primer vestigio encontrado del Troodon se trato de un solo diente, fue descubierto en el años de 1855, en la formación “Judith River” en Montana, Estados Unidos, a raíz de este descubrimiento al año siguiente en 1856, el biólogo Joseph Leidy, lo describió como una especie nueva de lacertilio (sub orden de reptiles), así que le daría el nombre de Troodon, que significa: “diente que hiere”, esto por la peculiar forma de la pieza dental.

Seria hasta 1901, casi 50 años después, que se le volvería a prestar atención a este peculiar fósil, ya que durante todo ese tiempo se le considero como un lagarto en lugar de como un dinosaurio, hasta que el paleontólogo Franz Nopcsa al examinar la pieza sugirió que fuera clasificado como Megalosaurus, esto genero intensos debates sobre la naturaleza del animal, ya que algunos creían que se trataba de un simple lagarto pero Franz estaba convencido que era un dinosaurio, al final los científicos aceptarían la teoría de Franz.

Diente de Troodon, en el que se notan a
simple vista los bordes serrados y
cortantes.

En 1924, nuevos estudios realizados por el paleontólogo Charles Gilmore apuntaron a que si se trataba de un dinosaurio pero no de Megalosaurus, sino que algunas similitudes de la pieza con otros fósiles encontrados hicieron que Gilmore concluyera que se trataba de un Pachycephalosaurus, en concreto él se refería al género de Stegoceras.

Debido a estas observaciones de Gilmore, por un tiempo decir Troodon, era lo mismo que referirse a los Pachycephalosaurus, imaginándolo como un herbívoro dotado de un cráneo grueso pasarían más de 20 años antes de que esta visión cambiara.

Dientes de Troodon comparados con una monda de un centavo de dolar.

Para 1932, se encontraron algunos restos fósiles de patas garras y algunas vertebras aisladas en Alberta, Canadá, sin embargo seria hasta 1945 cuando Charles Mortram Sternberg alzó la voz fuertemente alegando que Troodon no es un Pachycephalosaurus, esta afirmación era respaldada por su observación de que el diente encontrado compartía muchas similitudes con otros dientes de depredadores, por lo que a partir de este momento se clasificaría en su propia familia llamada: Troodontidae (Troodóntidos), sin embargo la historia no acaba aquí.

En 1969 el curador de fósiles Dale Russell, se encontró con un peculiar cráneo entre la colección de fósiles de un museo, este cráneo resulto muy peculiar ya que era de gran tamaño, especialmente en la cavidad craneal donde se aloja el cerebro aproximadamente 3 veces más de lo normal, este cráneo se creía pertenecía a Stenonychosaurus, pero en la década de 1980 Phil Currie reviso mas a detalle la caja craneana junto con un pie y se dio cuenta que el Stenonychosaurus, no era otra cosa más que un Troodon, además de que en 1987 también reconoció en los fósiles de Pectinodon y Polyodontosaurus al Troodon pasando de esa manera las 3 especies a ser consideradas como una misma y pasando a ser reconocido como un Teropodo.

Características.

El Troodon sin duda alguna no se distinguía por ser un depredador de gran tamaño, como muchos otros que reinaron durante el jurasico y el cretácico, al contrario en comparación con los grandes carnívoros este dinosaurio palidecía frente a ellos ya que era más bien de talla pequeña, sin embargo que esto no los engañe, ya que era uno de los cazadores más temibles de todos, a continuación hablaremos de todas las características que lo hacían sumamente especial.

El Troodon media aproximadamente unos 2 metros de largo, algunas estimaciones lo sitúan hasta los 2.5 metros, pero lo más aceptado es el largo de 2 metros, con una altura máxima de 1 metro, ya que es lo mas común, a pesar de su compacto tamaño, estaba completamente equipado para matar, su cuerpo pequeño le permitía tener una gran agilidad, esto combinado con unas patas estilizadas pero poderosas además de su cola larga y delgada, lo dotaban de una gran capacidad para maniobrar y para alcanzar grandes velocidades, de hasta 50 kilómetros por hora, lo cual es una velocidad muy superior a la de cualquier otro dinosaurio.

Diente original por el que fue descrito inicialmente el Troodon.

Este dinosaurio mantenía una postura bípeda, alzándose sobre sus patas traseras, dejando sus extremidades delanteras libres, las cuales le servían para sujetar a su presa o manipular comida y así llevarla a su mandíbula, tanto sus manos como sus patas estaban dotadas de garras muy afiladas, además de sus peculiares dientes que sin duda alguna tenían la función de causar el mayor daño posible, aunque sus mandíbulas no estaban diseñadas para resistir forcejeos prolongados ya que eran estrechas y largas, pero contaba con 120 dientes pequeños y serrados, todo este arsenal le resultaba sumamente útiles a la hora de cazar ya fuera en solitario o en manada, el Troodon era una verdadera máquina de matar.

Por si no fuera poco lo antes mencionado este dinosaurio compartía una característica con los Dromeosáuridos (Dromaeosauridae), aunque emparentados, no son tan cercanos como podríamos esperar, ya que el Troodon contaba con una garra curva en el segundo dedo de cada pata, similar a la del Velociraptor o el Deinonychus, con la diferencia que era más pequeñas, aun así se piensa que el uso que les daban era similar y que eran armas mortales.

Esqueleto montado de un Troodon.

Sus brazos son bastante peculiares ya que existe una controversia respecto a la posición de estas extremidades, la gran mayoría de paleontólogos tiene la creencia que al igual que otros depredadores pudo mantener los brazos estirados hacia adelante, pero otro grupo de científicos afirman que mantenía los brazos sobre el cuerpo plegados, como si se tratara del ala de un ave, esta teoría a cobrado mucha fuerza, pues los nuevos descubrimientos apuntan a que los Troodons, fueron una de las muchas especies que están emparentadas con las aves, incluso se cree que su cuerpo estuvo cubierto de plumas.

Algo que vale la pena mencionar es que existe una pequeña, pero notable diferencia de tamaño entre los Troodons encontrados hasta el momento, los especímenes que se encuentran en el norte del continente Americano específicamente en Alaska, son un poco más grandes en tamo que los que se han encontrado en el sur, se cree que esto se debe a que mientras más al norte se encontraban de los territorios continentales, había menos competencia entre depredadores.

¿El dinosaurio más listo?

En el apartado anterior no hablamos sobre una de las características mas especiales de esta especie, esto no fue por omisión, sino por que merece su propio apartado, como mencionamos antes, el cráneo del Troodon cuenta con una gran cavidad craneal, la cual supera a la de otros dinosaurios llegando a ser hasta tres veces más grande pero, ¿qué significa esto?

Hasta antes del descubrimiento del cráneo del Troodon, se tenía la idea de que los dinosaurios eran bestias torpes, salvajes y tontas, si bien se ha demostrado que algunas especies solo se guiaban por su instinto, la evidencia fósil parece indicar que este no era el caso del Troodon, pues incluso en los cráneos fosilizados se han llegado a observar algunas marcas de giros cerebrales, lo cual es muy raro en cualquier especie ya sea extinta o moderna, esto indica que tenía un cerebro muy grande.

Análisis detallados a estos cráneos han demostrado que algunas zonas de su cerebro estaban sumamente desarrolladas, principalmente el lóbulo occipital (parte posterior del cerebro), el cual se encarga de la memoria y la visión, esto sugiere que el Troodon era un verdadero genio entre los dinosaurios, si bien su capacidad estaba muy por debajo de la de un humano, algunos cálculos sugieren que el IQ de esta especie pudo ser 6 veces mayor a la de cualquier especie de dinosaurio conocida.

Esta gran inteligencia hace pensar a los científicos que este animal era capaz de utilizarla en la caza, por medio de estrategias más complejas, con ataques coordinados entre varios Troodons, para poder derribar presas mucho mayores que él.

Boceto del esqueleto del Troodon.

El mismo desarrollo del lóbulo occipital indica que tenía una excelente visión, esto lo confirma las grandes cuencas orbitales presentes en los cráneos, por lo que era muy posible que pudiese divisar a sus presas o peligros potenciales desde varios kilómetros, incluso pudo haber tenido una excelente visión en la oscuridad.

Además de su inteligencia superior y su magnífica visión, también se especula con la posibilidad de que los Troodons, tuvieran un sistema de comunicación “avanzado”, en comparación con otras especies, más que eso, estaríamos hablando de un “lenguaje” propio que les permitía coordinar sus ataques perfectamente y elaborar estrategias complejas, para confundir a sus presas, esto pudo hacer que el Troodon rara vez fallase en su caza.

Otro punto a su favor es que por el desarrollo de su cerebro se piensa (aunque es solo una especulación), que también era capaz de utilizar algunos objetos de su medio como “herramientas”, ya fuese rocas para ayudarse a herir a su presa o ramas para poder atrapar insectos en caso de ser necesario.

Estas especulaciones van de la mano junto con una polémica teoría del paleontólogo Dale Rusell (el mismo que encontró el cráneo del Troodon en un museo) y R. Séguin, la cual postula que si los Troodons, no hubieran encontrado su trágico final a fines del cretácico, esta especie hubiera evolucionado de tal forma que se hubieran convertido en seres bípedos, de postura erguida y sin cola, pensantes, con amplia capacidad para razonar, los cuales serian algo parecidos a los seres humanos, al que decidieron nombrar como: “Dinosauroide”, convirtiéndolos así en la especie dominante del planeta, ya que según lo afirma Rusell: El Troodon tenía todo a su favor como para dar enormes saltos evolutivos, aunque todo se toma más a una mera especulación que a una teoría en sí, ya que carece de muchos fundamentos y bases solidas.

Representación del Dinosauroide propuesto por Dale Rusell.

Esta polémica teoría del Dinosauroide, es tomada por la comunidad científica como un simple “¿Qué hubiera pasado si...?”, pero para muchos conspiranoicos, da pie a un sin fin de especulaciones y teorías, algunas de ellas relacionadas con los bien llamados “Reptilianos”, de los cuales no hablare pues saldría completamente de contexto.

El hecho es que el Troodon se extinguió hace 65 millones de años al fin del periodo cretácico, así que no podemos tratar de adivinar que pudo haber sido, solo podemos tratar de investigar y conocer más a fondo de este animal, así como de otras especies que coexistieron con él.

Alimentación.

A pesar de que al pensar en el Troodon como un Teropodo, lo imaginamos como un depredador, es decir un dinosaurio carnívoro, aun hoy en día existe cierta especulación sobre su dieta, pero esto no es nuevo, ya que recordemos que en un inicio se creía que era un dinosaurio herbívoro.

Los peculiares dientes del Troodon, de los cuales recibe su nombre (diente que hiere), nos dan una pista sobre su alimentación ya que están diseñados para herir, para cuásar daño, sin embargo, cabe mencionar que este tipo de dientes, se han encontrado en algunos dinosaurios herbívoros entre ellos algunos Pachycephalosaurus, de ahí la confusión que hubo al clasificarlo por medio de un solo diente.

Sin embargo la estructura de su cuerpo así como las afiladas garras que presenta en manos y patas, en especial su garra curva en el segundo dedo de cada pie, nos da pistas claras de que se trataba de un depredador activo, y así como el Velociraptor, pudo haber cazado en manadas, además de que se han encontrado dientes de Troodon cerca de restos de varios tipos de Hadrosaurios, se especula que el Troodon pudo cazar crías de otros depredadores mucho mas grandes.

Troodon cazando un pequeño mamífero.

Su método de caza pudo haber sido muy parecido a la del Velociraptor, el cual atacaba a presas mucho mas grandes ayudándose de ataques combinados por varios miembros del grupo, los cuales se basaban en la simple estrategia de ir desgarrando poco a poco a la presa con la garra curva del pie, para que al final la presa cayera víctima del shock nervioso y la pérdida de sangre.

La controversia respecto a su dieta aun sigue en pie, es tan grande la duda y los debates tan acalorados, que muchos paleontólogos han optado por tomar una nueva postura y sugerir que su dieta era omnívora, es decir que podía alimentarse tanto de plantas, frutas, carne de dinosaurio, de mamíferos o aves, huevos de otros dinosaurios o de aves, insectos, algunos peces de agua dulce e incluso carroña de ser necesario, esta postura podría poner un punto final al misterio de sus dientes.

Reproducción.

Normalmente es muy difícil obtener datos o pistas respecto a la reproducción de los dinosaurios, ya que los descubrimientos de huevos fosilizados son muy raros, más raro aun es descubrir un nido de dinosaurio intacto, pero con el Troodon nos encontramos con una magnifica excepción a la regla.

Para fortuna de la comunidad paleontológica, se han encontrado algunos nidos, 8 para ser exactos, todos ellos encontrados en la formación: “Dos Medicinas” en Montana, todos ellos en perfecto estado de conservación, el primero de ellos fue descubierto por John Horner en 1983, en estos nidos se pueden apreciar en promedio unos 20 huevos por nido, los nidos descubiertos se encontraron cerca de lugares que en el cretácico fueron pantanos, en lo que solían acumularse cadáveres de otros dinosaurios, esto hace suponer que los Troodons escogían esos lugares con la finalidad de que dichos cadáveres sirvieran de alimento a las crías recién nacidas.

Troodon empollando sus huevos.

Los descubrimientos de nidos de dinosaurios son bastante raros, aun así en algunas partes del mundo se han encontrado nidos tanto de depredadores como de presas, algo que hace especial el descubrimiento de los nidos de Troodon es el hecho de que entre estos mismos nidos se han encontrado algunos huevos los cuales aun contenían embriones de Troodon fosilizados, lo cual es un descubrimiento extraordinario, por si fuera poco, también se han encontrado ejemplares adultos sentados sobre los nidos.

Se creen que la hembra de Troodon contaba con dos oviductos, los cuales le permitían poner los huevos en pares, esto por la disposición de los nidos, y que era el macho quien los incubaba hasta la eclosión, una vez que las crías nacían era muy posible que se separaran de sus padres para valerse por sí mismos y formar sus propios grupos sociales.

A pesar de conocer cierta información sobre la reproducción del Troodon, es difícil saber el tiempo de incubación de los huevos, así como el comportamiento de las crías o si existía alguna clase de cuidado paternal hacia ellas o si por el contrario se valían por sí mismas.

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Referencias.

*Museo Americano De Historia Natural, 2001-2010, Enciclopedia de los dinosaurios y de la vida prehistórica, Londres, Inglaterra, Dorling Kindersley Ltd., Penguin Group.

*Douglas Plamer, Martin Brasier, David Burnie, Chris Cleal, Sir Peter Crane, Barry A. Thomas, Croline Buttler, John C. W. Cope, Robert M Owens, Jason Anderson, Roger Benson, Stephen Brusatte, Jennifer Clarck, Kim Dennis-Bryan, Chistopher Duffin, David Hone, Zerita Johanson, Andrew Miller, Darren Naish, Katie Parson, Donald Prothero, Xu Xing Kent McNamara, Fiona Coward y Richard Beatty.2009-2011 Prehistoria, historia visual definitiva de la vida en la Tierra, Londres, Inglaterra, Dorling Kindersley Ltd., Penguin Group.

*Conozca Más, (1993) Dinosaurios (VHS, DVD).

dinosaurios.org/troodon/

https://dinosaurioss.com/cretacico/omnivoros-c/troodon/

https://wwwecured.cu/Troodon

https://www.mundoprehistorico.com/portfolio/troodon/